martes, 31 de agosto de 2010

RECORDAMOS AL GRAN POCHO DELOS SANTOS RECIENTEMENTE FALLECIDO












Mi homenaje al querido Pocho De Los Santos ,recientemente fallecido , nada mejor que traer al presente esta publicación de un completísimo reportaje realizado por la sección deportiva del desaparecido El Diario de la noche en el año 1978.

Corría el año 1925 y en el Cerrito de la Victoria, allí muy cerquita de la Fábrica de Vidrio, nacía en el hogar de don Nicasio de los Santos y doña María Elena Grossi un niño que se llamaría Luis Ángel De los Santos

Un 8 de junio del 25 era el momento en que naciera uno de los elegidos del deporte nacional. Un crack, un verdadero titán del de­porte y justamente el ciclismo era el tocado por la "varita mágica" de la popularidad, la grandeza, la proeza.

Admirado y reconocido en todo el mundo. Parte de la vida dedicada al deporte del pedal. Fueron pocos años los que corrió, pero, aún así, lo hizo en excelente forma dejando entrever que tenía que integrar la galería de los mejores deportistas de nuestro medio. Luis Ángel De los Santos, el que le ganara a Mario Gela en nuestro propio Velódromo. El campeón Olímpico y del Mundo italiano debió resignar su chance y perder ante nuestro "Pocho', así se le conocía y conoce a De los Santos. La revancha del Mundial del 48 cuando se ubicó en la cuarta ubicación de velocidad al ser eli­minado justamente por Gela.

Pero mejor lo dejamos a él de que se encargue de contarnos su vida dentro del ciclismo:

"LOS PRIMEROS EN PUNTA DEL ESTE"

Yo nací en el Cerrito de la Victoria y no en Maldonado como muchos creen. Lo que sucede es que mi padre, Nicasio, trabajaba haciendo la temporada allá junto a mi madre y mis hermanos. Lógico, yo nací en junio, pero, al venir diciembre mis padres se fueron para Maldonado. El viejo tenía un taxímetro que fue uno de los pri­meros que estuvo al servicio de Punta del Este, su libreta tenía el número 12. La casa la hicimos nosotros, la vieja, papá, mis her­manos y yo. Con arena, pedregullo y bloques hechos por nosotros mismos . Todavía está allá, en la 17 y Gorlero, es un taller de bicicletas. ¿Don Nicasio gustaba del ci­clismo?

A mi padre le gustaba mucho el deporte, pero practicaba el fútbol. Ahora siempre comentaba que un cuñado y él fueron los primeros en llevar una bicicleta a Punta del Este. ¿Cómo empezó en el ciclismo?

Creo que tenía entre 9 o 10 años y había unas carreras en Maldonado y yo me entreveré y pese a que tuve varios problemitas con la cadena logré ganarle a los otros pibes. Era una bicicleta de paseo

inglesa, recontra pesada, yo le saqué los guardabarros, la había "alivianado" ya que era muy pe­sada. Un trasto enorme.

- Después, -prosiguió diciendo De los Santos- a los 11 años mi padre me compró una bicicleta de media carrera. Era una Olimpia. Un chiche. Entonces comencé a ir a las carreras que se hacían en Piriápolis, San Carlos, Pan de Azúcar, Minas y ganaba o andaba ahí, entreverado entre los prime­ros.

¿Defendía a algún club?

- No, no había clubes en ese entonces por Maldonado. Después, tenía 12 años, cuando se reunieron unos cuantos vecinos y formaron un club de barrio que al final nunca se afilió y por lo tanto seguía sin tener club al que defender.

¿Cómo llegó a su primera cami­seta?

- Recuerdo que vinimos a Mon­tevideo, lo hacíamos siempre como premio a nuestra temporada de trabajo, a casa de una tía mía que vivía cerca del club Maroñas del cual mi tío era habitué. Y dijo: "tengo un sobrino que es un fenómeno andando en chiva". Y bueno, de esa forma comencé en el Maroñas y fue mi primera camise­ta. ¿Un gran equipo?

- Ya lo creo que sí. Me parece que uno de los mejores que yo Integré. Pero había cada "nenes". Estaban conmigo nada menos que Cecilio y Luis López, José Sacomani, Enri­que Macíel, Jorge Moreno, Cris­tóbal Trueba. Pienso que el mejor de la época.

¿Pero muy inquieto cambió de casaca?

- Sí, fue haya por el 48-49 y mi nueva institución fue el Belvedere. ¿Cambió de barrio?

- Ojo que no estaba en el Paso Molino. La sede del club estaba en 21 de Setiembre y Libertad. Los corredores vivíamos allí y creo que nunca los corredores tuvieron las atenciones que nosotros recibimos en aquella época.

¿Auge de nuestro ciclismo?

- No sé si auge, pero si había gran rivalidad. Estaba Peñarol, Nacio­nal, Unión Ciclista y nuestro club que eran muy fuertes y que trata­ban de prevalecer unos sobre otros.

¿Otras épocas?

- A mí la verdad no me gusta eso de que "todo tiempo pasado fue mejor", creo que las cosas se dan o no. En aquel momento las condi­cionantes se daban y puede ser, o es, que ahora no sea así.

- Pero prosiguiendo, Belvedere y Peñarol eran los mejores y cada uno tenía un "montón" de ciclis­tas. Recuerdo que nuestra institu­ción era comandada por el Dr. Frank, un gran deportista alemán que le gustaba mucho el ciclismo y volcaba todo al mismo. ¡Qué diri­gente!

¿El equipo? y

- Cristóbal Trueba, Virgilio Pereyra, Juan Silva (Campeón ame­ricano), José y Julián Reyes Mesa, Juan Alegre, Leonardo Pérez, y yo que se cuantos más.

Eramos 14 o 15 y todos preparados para ganar. Pero hay que ver como nos cuida­ban. No se nos escapó ninguna prueba.

LA VUELTA DE VIRGILIO PEREYRA

¿Su pasaje por la institución de Belloni?

-Sí, Belloni, antes se llamaba Cuchilla Grande. Justamente allí fue mi primera competencia, iba corriendo el año '37, y como tran­sitaban pocos autos por esa Ave­nida se hizo la competencia en la cual entre primero en 3a categoría y tercero en mayores. Corríamos todos juntos en ese entonces.

- Luego, recuerda "Pocho", me mudé para la Curva de Maroñas y seguí corriendo por el club, gané varios Campeonatos Nacionales, subida al Cerro, y cuando obtuve el Nacional de 50 kilómetros en se­gunda pase a la categoría de privi­legio.

los ascensos?

- Menores eran hasta los 17 años, de ahí se pasaba a Novicios y con un puntaje se lograba ir a Tercera, también con puntaje a segunda y a primera y al cabo de 2 o 3 tempo-' radas se llega a primera categoría. Yo tuve mucha suerte. En una temporada logré mi ascenso a primera categoría.

¿En que año?

- Era 1943 y estaba en primera categoría y pase al Club Ciclista Fénix, también del barrio. Logra­mos una seguidillas de carreras. Alrededor de 20 seguidas sin per-, der, fueron tres meses maravillo­sos, sensacionales. Barrimos con todos los premios que habían.

- Incluso recuerdo que le gana­mos la Vuelta del Uruguay con Virgilio Pereyra.

¿Tuvo una incidencia curiosa, verdad?

- Ya lo creo que sí. íbamos peleando la punta. Nosotros tení­amos como líder a Virgilio Pereyra y ellos trabajaban para Primo Zucotti, recién llegado a Uruguay y Mario Debenedetti. íbamos en punta y faltaba una etapa.

"Pocho" De los Santos, revive el momento, sus gestos son elocuentes.

- Las cosas se nos pusieron feas en carrera. Debido al estado de los caminos Virgilio pinchó tres veces y Zucotti aprovechó a "tomárse­las1* con Debenedetti, era sólo un minuto nuestra ventaja y en-seguida la neutralizaron. Pasaron ellos al frente por más de 2 minu­tos. Nosotros nos armamos atrás para traer a nuestro lider y traba­jábamos a muerte. Cuando Íbamos por Toledo otro percance, se le rompia el cambio de velocidad y en aquel momento la reglamentación no permitía el cambio de máquina, salvo por ruptura de la horquilla, arreglamos el cambio y nueva­mente a seguir.

¿Les dieron caza?

- Aqui viene lo curioso. Al llegar a Manga ellos se vieron retrasados porque estaba de maniobras un ferrocarril y no podían pasar y eso nos ayudó a descontar y final-mente entrar, si entrar ya que antes se hacia, al Estadio Cente­nario trayendo a nuestro ganador. Los italianos de Peñarol reclama­ron ante el director de la prueba y decían que él les había prometido descontar el tiempo que habían perdido pero era inútil, no tenían argumentos. En el reglamento eso figura como accidente de carrera y no corespondía la reclamación. Ganamos nosotros. Digo nosotros por el equipo y Pereyra ya que yo por el gran esfuerzo en busca de descontar diferencias cuando es­tábamos en el Parque de Los Aliados me tiré de la bicicleta al pastó. ¡No daba más! Estaba que estallaba por dentro. Además, me había escaldado, Fue increíble. Costó pero al final lo logramos.

Eramos muy unidos. Y no terminó allí ya que inclusive luego le ga­namos las 24 horas a la Americana. ¡Qué épocas!

ARAÑO LA VUELTA PERO NO LA GANO

- En 1948 corrí la Vuelta Ciclista del Uruguay por primera vez, y defendía los colores del Club Bel­vedere.

¿No la pude ganar?

- Tuve arañando dos veces la Vuelta Ciclista del Uruguay. Entré segundo y tercero, pero recuerdo una en particular.

Yo había ganado casi todas las etapas y Atilio Francois estaba ahí, mi­rando, esperando el momento y justamente se dio, tuve un des­perfecto mecánico y Atilio que no era tonto ni perezoso me dejó por el camino.

- Andaba que era un "balazo"-comenta- pero el ciclismo tiene esas cosas. Hay que estar bien preparado pero también hay que tener un poco de suerte, de lo contrario, no pasa nada. Marchas como el mejor.

¿Sufría en las barreras de ruta?

- Puede ser. Yo era más "pistero" que rutero, pero lo que pasa es que la Vuelta la quieren ganar todos y yo, por supuesto, no quería quedarme del lado de afue­ra. No era lógico. Me quedó en el "buche".

LA SELECCIÓN

Alrededor de 1950 Luis Ángel De Los Santos pasaba al Club Muni­cipal. Pero no era sólo él, sus compañeros también lo hacían. Era un grupo muy unido y se habían acostumbrado a estar juntos y era el Municipal su nueva institución, aunque...

- Virgilio Pereyra y yo no corri­mos mucho por la institución ya que estuvimos representando a la selección en el Campeonato del Mundo, Panamericanos y casi que no vestimos la camiseta de esta institución.

¿Primera experiencia en la se lección?

- No. Ya había estado antes. ¿Cuéntenos un poco de la selección?

- En 1946 participé, en represen­tación de nuestro país, en el Cam­peonato Americano, Rioplatense, en el 47 estuve en Chile, era cuando defendía los colores del Fénix y fue allí cuando Atilio Francois se cla­sificó Vice campeón Mundial de Persecución individual.

¿Su gestión en esa oportunidad?

- Fui eliminado en velocidad y en fondo llegue retrasado, por el 40 lugar, creo. Recuerdo....

Adelante, prosiga...

- En la carrera de ruta recuerdo que Atilio se cayó y trató de alcanzar pero no logró. Lo que le llamaba la atención era que pasaba a cada rato a "un hindú", lo dejaba por el camino y al rato estaba adelante de él de nuevo, lo volvía a pasar y al rato la misma historia. Cuando llegó nos comentó: "Muchachos aquí hay algo raro. Pasé como cinco veces al mismo corredor, lo dejaba muerto y a los pocos kilómetros, sin siquiera pa­sarme, lo tenía adelante". Noso­tros los buscamos y cuando los encontramos nos "morimos" de risa. Eran todos igualitos. Hasta le sacamos una foto.

¿Otras competencias inter­nacionales?

- Las Olmpiadas del 48 en donde entré cuarto en persecución y perdimos por nada el segundo lu­gar. Perdimos con Inglaterra. El equipo lo formaban Francois, Juan Ramón de Armas, Ramón Bernasqui y yo. También en el 48 participé en el Mundial de Amsterdam y obtuve la cuarta posición al ser eliminado en los cuartos de final por Mario Gela (Italia) que luego seria el Campeón del Mundo y anteriormente fue Campeón Olímpico. Resulta que a mí no me tocaba con él los cuartos de final pero por esas ''cosas raras" me tocó con él, la verdad que no podía ganarle pero hubiera llegado a la final. Recuerdo que estuvimos 5 minutos haciendo surplace. La revancha la hicieron después aquí en Montevideo y le gané, pero él estaba un poco disminuido, no lo dejo de reconocer.

¿Volvieron a Europa luego?

- Si. En 1949, 50 y en el 52 fuimos a Finlandia. Entre el 47 y el 52 fue una actividad internacional tre­menda. No descansamos siquiera 15 o 20 días. Terminábamos la tempodara aquí y nos íbamos a correr a Europa y cuando finalizaba allá volvíamos acá y otra vez a darle que es tarde. Luego de eso pasé a Nacional y dejé de correr.

"SI PROTESTO NO ENTRO NI TERCERO"

- En las últimas competencias no me preparaba bien. Había ganado casi todos los últimos Campeona­tos Nacionales y en el último año me presenté pero no estaba en mi plenitud.

¿Qué sucedía?

- Creo que estaba saturado. Fueron pocos años pero muy in­tensa la preparación y el régimen de competencias que hice. Recuerdo que yo me hacía una pretemporada con unos 2.000 ki­lómetros y con eso me sentía a punto. Era seguro que sí largaba en esas condiciones que si no ganaba estaba "arañando" el primer puesto. Si fuera un automóvil creo que ya me tendrían que haber hecho el tercer o cuarto ajuste. Recorrí ciento de miles de kiló­metros en mi carrera deportiva. En la actualidad sigo andando en bi­cicleta y me hago 70 u 80 kilóme­tros cómodo.

¿El retiro?

- Tuve dos. El primero fue en un Nacional de Velocidad. Me decidí a presentarme y había dos juveniles, Serra y Juan Carlos Pérez (uno de los más grandes velocistas de nuestro país), eran dos pibes, me costó pero llegué a las finales con ellos. Entró primero -Pérez, se­gundo yo y tercero Serra. Hubo una protesta de Serra ya que entendía que el ganador había hecho una maniobra ilícita y le piden a mi técnico que proteste y se realice nuevamente el match. Me consultó y yo le dije: "Deja quieto asi. Si corremos de nuevo no entro ni tercero". Si "volaban", yo no podía con esos "pibes".

Entonces, ¿se retiró?

- Sí, pero a los cinco años volví a correr.

- Un buen día apareció un em­presario francés que quería orga­nizar una competencia denominada "6 días" en el Velódromo y el deseaba que yo formara pareja con Jorge Buter, ganador Vice campeón de Velocidad. Primero le dije que no, pero después no me pude negar.

¿Y corrió?

- Me prepara durante 4 meses, me costó muchísimo. Tenia 10 kilos de más y tenía que sacárme­los y hay que ver que tenía 32 años, pero poco a poco me fui sintiendo bien y con fuerza para quebrar los kilómetros y no sólo competí, sino que también ganamos. ¿Fue difícil?

- No hay competencia fácil. To­dos vamos a la misma. Ganar, lo demás no importa. En la oportu­nidad se lesionó mi compañero y perdimos una vuelta, pero terminé corriendo en pareja con Jorge Alessander y logramos obtener la competencia de las "6 horas**. Luego de ahí si dejé la práctica del deporte del pedal y nunca más volví.

¿Pero no se sentía bien? '

Si, pero lo que pasa es que me quería retirar antes de que el ciclismo lo hiciera conmigo. Hay que saber retirarse a tiempo. Aunque creo que podría haber corrido algunos cuantos años más con éxito. Me parece que llevando una vida ordenada un corredor llega a su plenitud entre los 25 y 30 años.

LA ESCUELA DE CICLISMO

Luego de la práctica, ¿dejó, se alejó del ciclismo?

No, eso no se puede. El ciclismo es una gran familia y eso por más trillado que esté no es mentira. Es imposible salirse de ella.

¿Cómo prosiguió estando en el deporte del pedal?

Trasmitía las competencias con don Pedro Puche en la Voz del Aire que ahora es radio El Tiempo.

Después vino la Escuela de Ci­clismo...

Eso fue en 1974 aproximadamente. Por ese entonces comen­zaba a trabajar en la Escuela de Ciclismo en el Velódromo Muni­cipal. Era un grupo de juveniles con los cuales trabajamos alrede­dor de 3 años con ellos.

¿Y... qué paso?

- Lo de siempre. El trabajo nunca se pudo realizar como queríamos ya que faltaban los medios eco­nómicos necesarios como para hacerlo. Luchamos contra "viento y marea tratando de sacar adelante la escuela, suplimos las ca­rencias con dedicación, pero es muy difícil sin tener medios hacer nada.

¿En qué consistía el trabajo?

- Teníamos que formar al ciclista de chico, había que enseñarles formas de competir, pero, además formas de comportamiento, no era sólo bicicleta.

La parte técnica.

Iba desde dominar la bicicleta, a sentarse, competir y observar al contrario y respetarlo, nunca subestimarlo.

¿Hay corredores de esa escuela en competencia en este momento?

- Ni más ni menos que los mejores. ¿Nombres?

- Gerardo Bruzzone, Ricardo Calleri, Juan Carlos Seijo, Roberto Castromán (un olvidado de todos) y Walter Plaza. Con éste último fuimos a Argentina y ganó con 1V6, no hay ninguno que haya puesto ese tiempo. Y creo que a todo el que pone 11 y fracción hay que prepararlo y cuidarlo para lle­varlo a competir a todo nivel, a cualquier lugar del mundo. Hay que luchar y trabajar es buenísimo ese pibe, pero...

LA PISTA ES

ES FUNDAMENTAL

- Un corredor primero se debe hacer en la pista y luego ir a la ruta. Están mejor preparados. La pista es la formación ya que allí lo tiene todo. Para lograr un corredor completo primero tiene que ha­cerlo un buen pistard, allí es donde aprende a dominarla bicicleta a su antojo, adquiere sprint, velocidad, viveza, rapidez mental, a tirar su máquina.

¿Rapidez mental?

- Es fundamental. En pista la bicicleta, como todos saben no tiene frenos y tiene piñón fijo, no se puede dejar de pedalear, y por tanto si alguien pincha o se cae delante de uno en fracción de segundos debe decidir que hacer, a ahí la rapidez mental es fundamental, la decisión debe ser ins­tantánea, diría yo.

¿Por qué no se le da impor­tancia?

- No es que no se le de importan­cia, lo que sucede es que no se encara como se debería de hacer.

NO DIGO TRAER AMERICANOS... PERO


¿Cómo lo haría Ud.?

- La temporada de pista, primero, debería realizar en pleno verano, es » decir, que el clima se preste como -para un espectáculo al aire libre. Habría que hacer algo parecido a lo que hizo el basquetbol. Trajo ju­gadores americanos y la verdad es que lleva mucho público a las canchas. Y hay que ver lo que se han superado los jugadores: nacionales.

¿Corredores extranjeros es las solución?

- Si, y buenos. Pero no para correr una carrera sino para que corran varias aquí. Se que es caro pero ellos mismos, al final, son los que se pagarán sus estadías. Pero debemos comenzar. No se puede, estar más en esta apatía.

¿Hay que encararlo más como O espectáculo comercial?

- Evidentemente, sin dejar de ser deporte hay que buscar la manera, de encararlo con un montaje comercial con el fin de obtener el * dinero necesario como para "bancar" ese tipo de espectáculos con la presencia y participación de corredores extranjeros. En todos lados es espectáculo y mientras aquí no se encare así no podremos lograr lo que queremos, y digo queremos ya que yo quisiera que eso se lograra por el bien de mi deporte preferido. ¿Antes era distinto?

Volvemos a lo mismo de hoy. "Todo tiempo pasado fue mejor". No quiero creerlo así. En mi época era distinto. Se andaba mucho y los clubes contaban con otro apoyo económico. Ahora si no es por el esfuerzo particular de algunos de los socios no se podría practicar este deporte en nuestro país. La verdad es quo tendría que reverse el Calendario de la Temporada, esas carreras de dos días no con­ducen a nada, dan muchos gastos y no recaudan nada. Deberían obligar a realizar un espectáculo en el Velódromo y el club que corra con los riesgos. Si hace o mejor dicho, monta un buen espectáculo saldrá adelante. Si no, no creo que pierda mucho más que con las carreras que realiza de dos etapas.

DEBEMOS COMPETIR

EN FORMA INTERNACIONAL

Estoy de acuerdo en que no podemos salir como lo hicimos en las últimas presentaciones, pero...

¿Pero..?

Si bien es cierto que en las últimas presentaciones fuimos poco menos que de excursión, también es cierto que aquí no podemos aprender nada. Hay que salir, hay que formar una selección estable y con competencias en enero y febrero, los directores técnicos podrán sacar sus conclu­siones, y nombrar los que integra­rán el plantel, una vez finalizada

nuestra temporada se viaja a Eu­ropa y allá se consigue donde estar y con que alimentarse. No es imposible.

¿Y las inferiores?

- No se deben de descuidar. Dentro de unos años desaparece­rán los Bruzzone, Calleri y otros pero hay que ir trabajando para que tengan los sustitutos, de lo con­trario todo habrá sido en vano.
ES VÁLIDO RECORDAR QUE ESTA NOTA REALIZADA POR EL DESAPARECIDO DIARIO DE LA NOCHE FUE REALIZADA HACE CERCA DE 30 AÑOS DE ALLÍ QUE DE LOS SANTOS MANEJE CONCEPTOS , NOMBRES QUE SE AJUSTAN A OTRA ÉPOCA.